Sam no es mi tío
Un inmigrante sin documentos se burla del sistema y se gradúa con honores. Una vieja cantante de tangos busca otro cuarto de fama mientras desinfecta excusados en Miami. Una batalla de clases en una quesería donde todos están armados con cuchillos. Un gringo que defiende a latinos pobres que lo van a traicionar. Una mujer y su amante ven por la tele la caída de las Torres Gemelas mientras especulan si el esposo murió en el ataque.
En “Sam no es mi tío”, escritores, periodistas, y académicos latinoamericanos se propusieron narrar ‘América’. Los veinticuatro cronistas que participan en “Sam no es mi tío” no creen en la Historia con mayúscula, ni se fían de lo oficial o se dejan arrinconar en los márgenes. Cruzan, diariamente, los centros y sus orillas. Para ellos la realidad está compuesta por millones de historias en minúsculas, como las suyas. Narrarlas es, finalmente, dar sentido a esos fragmentos abstractos, hacer visible lo invisible.
Estas crónicas son retazos de la microhistoria americana contemporánea, un relato que permanecerá siempre incompleto.
“Sam no es mi tío” es editado por Diego Fonseca y Aileen El-Kadi y cuenta con textos de Daniel Alarcón (Perú), Jon Lee Anderson (Estados Unidos), Joaquín Botero (Colombia), João Paulo Cuenca (Brasil), André de Leones (Brasil), Gabriela Esquivada (Argentina), Eduardo Halfon (Guatemala), Yuri Herrera (México), Hernán Iglesias Illa (Argentina), Andrea Jeftanovic (Chile), Camilo Jiménez (Colombia), Juan Pablo Meneses (Chile), Diego Enrique Osorno (México), Guillermo Osorno (Mexico), Edmundo Paz Soldán (Bolivia), Claudia Piñeiro (Argentina), Santiago Roncagliolo (Perú), Carola Saavedra (Brasil), Ilán Stavans (México), Wilbert Torre (México), Eloy Urroz (México) y Jorge Volpi (México).